El próximo 16 de marzo se cumplen 45 años de la fecha de ingreso a la Escuela de
Oficiales de los cadetes que conformarían la Promoción “Bernardo Paredes
Ramírez”, más conocido como “Audaces”. ¿ Audaces?
Este nombre tiene mucho significado y ha
marcado nuestras vida personal y profesional.
Audaz es sinónimo de intrépido ( nombre que
después le colocamos a nuestros
ahijados), requiere cierta dosis de valor, temeridad y arrojo ante el peligro.
.También, este nombre obedecía a un cambio . A
partir de nuestra promoción, se empezó a buscar nombres a las promociones que
se alejaran de todos aquellos nombre de promociones de la riquísima fauna , sin
desmerecer esta preferencia porque muchos animales tienen características que
los identifican que los hace inigualables o aquellos nombres de doble sentido Pero
los nóveles cadetes aspiraban a cosas
diferentes, a un cambio, un nuevo amanecer.
Lejanos han quedado esos cuatro años de escuela, diría, los mejores
años de nuestra vida. Ingresamos en plena juventud ( 18 o 19 años), incluso
había algunos por debajo de estas edades , imbuidos de ideales, esperanzas,
amor a la investigación criminal .
Con el tiempo llegamos a tenerle cariño al Alma Mater, la Escuela de Oficiales de la Policía de
Investigaciones que quedaba en la Avenida Aramburú 550 -Surquillo porque este lugar
encierra grandes recuerdos, tal es así
que cuando uno visita este edificio que fue el CINPIP, convertida hoy en oficinas en donde trabajan un
enjambre de policías , nos llenamos de
nostalgias e impotencia porque nada brilla como en aquellos entrañables días
cuando funcionaba el CINPIP.
También nos llenamos de recuerdos porque aún existen esos entrañables espacios o rincones
, mudos testigos de nuestras reflexiones o para escapar del mundanal ruido o la persecución de los Padrinos o simplemente
para cabrearse de las calistenias .
Pero todo esa “formación
de carácter “ se superaba porque por encima estaba el amor que
sentíamos por convertirnos en “detectives” ( una profesión que es un arte ,
tan escasos en nuestros días , tal es
así que dicen que los detectives se han
convertido en eslabones perdidos).
La mayoría de los ingresamos al CINPIP, la Escuela
de Oficiales ubicada en la Avenida Aramburu 550, buscábamos un propósito, teníamos vocación: de convertirnos
en detectives para descubrir los grandes crímenes de nuestra sociedad y
capturar a los responsables.
En esa
época, el CINPIP, contaba con catedráticos de renombre, pesquisas, operativos
en todo lo que era investigación criminal y criminalística , situación que nos
hacía sentir orgullosos de habernos formado en una de las mejores escuelas de
detectives, cuyo Patio de Honor era como tierra sagrada, lo cruzabas en paso
ligero o en carrera .
Hoy, nos aflige ver convertido este sagrado
patio en donde había un monumento y una llama votiva a los mártires de la
Policía de Investigaciones en una atiborrada playa de estacionamiento que es
una vulneración a este sacrosanto lugar .Por eso cada vez que visitamos lo que
fue el Alma Mater de los detectives , somos sobrecogidos por una sideral tristeza,
nostalgia y desazón de lo que pudo ser y
nunca fue .A la par de excelentes catedráticos, también contamos con recordados
y eficientes oficiales instructores .
Recordamos a los oficiales que fueron nuestros jefes de
Compañía, al Mayor Bernardo Paredes Ramírez ( la promoción lleva su nombre ) , siempre serio , y a la cabeza de las marchas gritando “Vista al
Guía”, fallecido tempranamente por un síncope cardiaco; asimismo el Mayor del
Águila, oficial correcto, pausado, gran amigo. exigente y disciplinado; al
Capitán Mario Luque Luque , carismático
y pragmático.
¿ Cómo no recordar a nuestros padrinos, la
promoción los Leones? Hubo de todo: buenos consejeros, mejores
maestros, pero , otros exageraron el padrinazgo, reduciéndoles a plantones
después del almuerzo, cantores para aliviar sus sueños o tamborazos en el
pecho.
Los años han pasado a tropel , la mayoría de
los audaces estamos más próximos a los 65 años que nos convierten en seres humanos ricos en
experiencia y sabiduría , así como de comprensión de la naturaleza humana, pero
muchos audaces ya no existen en este vida , nos llevan la delantera dejando
pesares en todos aquellos que los recuerdan , principalmente sus familiares .
Cada año la lista crece porque es la ley de
vida, nacemos , crecemos , y en determinado momentos nos iremos de este mundo y
lo que queda son los buenos momentos o instantes que hemos vivido ..
Haré una lista de los que nos llevan la
delantera, todos ellos fueron especiales , grandes detectives a la par que
seres humanos que brindaron sus mejores
años a la Policía de Investigaciones :
1.
Héctor Aliaga Diaz
2.
José Anderson Pérez
3.
Ernesto Begazo
Vizcarra
4.
José Cabezas
Mora
5.
Jaime Castillo
Acosta
6.
Vladimir Castillo
Sánchez
7.
Julio Fernández
Noriega
8.
Guillermo Frías
Matos
9.
Abel Ferrando
Ruiz
10.
Eli Grandes López
11.
Ulises Jiménez
Alegría
12.
Manuel Morín
Garrido
13.
Víctor Oliveros
López
14.
Víctor salcedo
Cubas
15.
Néstor
Santillas Mori
Hoy nos vemos antes el espejo, envejecidos por el paso de los años, con
dolores que saltan de un lugar a otro de nuestro cuerpo, pero sabios en
experiencia y conocimientos , lejos de todo la embriaguez del poder ( todos
estamos en retiro), y se presentan las mejores
condiciones para buscar que rescatar la
amistad perdida, acabar con los
desencuentros, buscar la comunicación
perdida o para a recordar o celebrar las fechas históricas, como el 45 aniversario del ingreso a la Escuela de
Oficiales, un 16 de marzo de 1973..
En esta fecha, quiero saludar a todos los
“audaces”, enviarles un fraternal saludo
por la red, he tomado conocimiento de que se ha organizado
un almuerzo por el aniversario en la AOPIP, un ágape
necesario porque nada se compara estrechar
la mano, conversar con el promocional , así como a sus dignas esposas o
compañera de toda la vida que han sido comprensivas en nuestra carrera luchando
contra la criminalidad ya que ver los
rostros amigos o promocionales , fortalece la memoria . A nombre de mi esposa,
de mis hijos , nietos y el mío, les
envio un abrazo fraternal en este día y deseo que celebren, gocen, y recuerden con la misma
alegría y esperanza de aquellos jóvenes cadetes durante el almuerzo celebratorio del 16 de marzo del 2018. .
No estaré físicamente con ustedes, pero espiritualmente,
comparto sus alegrías y me auno a esta celebración .¡ Recordados Audaces!
Reciban un saludo cordial por el 45 aniversario
de ingreso al Alma Mater de su Brigadier y amigo .
Benedicto Jiménez
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