El 13 de marzo último, la sala penal permanente, integrada por los vocales supremos, Villa Stein, Pariona Pastrana, Neyra Flores, Sequeiros Vargas, y Figueroa Navarra, revolviendo un recurso de nulidad interpuesto por el ex fiscal superior, Martin Retamozo Roca contra la Tercera Sala Penal que había dispuesto el archivo del proceso de querella (cuando Jiménez fue director de la Revista Juez Justo, en Junio 2011, se publicó una nota periodística contra el Fiscal Retamozo titulado “Acaso Familiar” que puede ser visto por Internet) por prescripción de la acción penal. La Corte Suprema ordenó archivar el proceso, dejar nula la sentencia (2 años de prisión efectiva y el pago de 100 mil nuevos soles por reparación civil) y la inmediata libertad del procesado. La jueza del 30° juzgado Penal de Lima, en el mes de diciembre 2015, fiel a la consigna de “hacer leña del árbol caído” sentenció de manera desproporcionada e irrazonable a Benedicto Jiménez con 2 años de prisión efectiva, cuando por este tipo de delito (querellas) lo usual es pena condicional. Pero como el tiempo es inexorable e incorruptible, esta querella fue enviada al archivo, disponiendo la Sala Suprema la excarcelación en este proceso y el borrado de todos los antecedentes y registros de este caso. Jiménez, actualmente tiene detención domiciliaria mientras la fiscalía busca que encontrarle responsabilidad en una investigación que ya lleva 2 años 9 meses. En todo este tiempo, los indicios son cada vez más esquivos y su castillo de arena se les cae, porque no toman en cuenta que la verdad, la justicia el final se imponen y no necesita mucho esfuerzo para destruir la mentira como los huaicos que estamos viviendo a diario.
Gerard Ingenieros
Marzo 2017
