Hagamos un esfuerzo de imaginación para
respondernos a esta pregunta: ¿Cómo pasarán, Ollanta Humala y Nadine Heredia,
sus días en las cárceles dónde han sido enviados?
Como
dijo Edmundo Paz Soldán, Boliviano, quien vive hace 30 años en los EE.UU, en su
obra, Los días de la peste, la
cárcel son microcosmos donde conviven el horror con la cotidianeidad.
Esa es la cruel realidad que los tocará
vivir, por más que diga Ollanta Humala que es un militar preparado para
situaciones extremas y se le ha enseñado a sobrevivir ; recién ahora tomará sentido de lo que significa la
libertad y el sentido de la frase “ cárcel es cárcel “ y que cuando un ser humano
es privado de la libertad se siente como perder media vida.
Pero lo más trágico: serán testigos impotentes de la desintegración de su núcleo familiar
porque los que realmente lo quieren como padre, hermano e hijo lo acompañarán
la prisión: ellos también se sentirán prisioneros.
Serán testigos también de que el mundo de
la prisión está hecho para los desheredados de esta tierra, los que cayeron en desgracia,
que las cárceles tienen sus propias reglas donde existe un sistema de corrupción
asolapada que se traduce en que todo tiene un precio y si no se vende el aire dentro
de la cárceles es porque el ingenio
peruano aún no ha encontrado el modo de hacerlo .
Por ahora estarán en el Anexo , La
Prevención o una zona VIP , con ciertas comodidades , cuidándolos que nada les
pase , pero con el tiempo tendrán que mezclarse con la población y hacer vida
en común .
No estarán en aquellos lugares ( los
pabellones) en donde impera las violaciones, la micro comercialización de
drogas, el “licor canero” , los crímenes
encubiertos , las extorsiones, como el menú del día, junto a la miseria, las
enfermedades y el sida que se extienden
imparables en ese submundo que es las cárceles en nuestro país .
Eso se
vive a su alrededor, en los pabellones,
pero es parte del sistema penitenciario que nadie hasta hoy ha podido superarlo
porque eso de reinserción, rehabilitación, resocialización, sólo figura en la
Constitución y el código de ejecución penal y su reglamento.
La realidad es otra, en las cárceles tienen
que aprender a sobrevivir y la clave es adaptarse ..
La vida en una cárcel, por más dorada que
sea, por más que digas que están como en un cuartel (Ollanta) es dura y los días y noches son larguísimas.
Poco a poco te das cuenta que estos lugares
están hechos para destruirte física ,
psicológica y moralmente.
El problema es la edad porque si un año de
prisión para un joven es un año, para un anciano o viejo es el doble porque se
suma los achaques propias de la edad y la vejez es un mal incurables, según
Séneca..
La realidad carcelaria es muy drástica,
superpoblada, generadora de prejuicios irreparables en la persona del procesado
o condenado.
Más aún en la persona de los procesados que
están sujetos a medida cautelar de prisión preventiva que cumplen esta medida
como una pena anticipada, en las mismas condiciones de los sentenciados.
En la cárcel no
estás atrapado en una carrera sin fin en pos del éxito, el poder, porque todo ello no importa.
Las veleidades del poder, la gloria, el
heroísmo, las medallas, las condecoraciones, las diplomas, todo eso es vanidad.
Aprendes el valor de la sencillez y la
humildad.
La soberbia y la vanidad, tienes que dejarla fuera y aprender a ser humilde , esa humildad del cristiano
porte quieras o no , en la soledad, cuando te coge ese manto negro que se
conoce como la “pensadora” , te revistes de esa espiritualidad cristina
que te lleva a comprender y entender la pasión de Cristo ; un hombre justo que
fue traicionado, negado, vejado,
humillado , y, finalmente, crucificado . Y, todo por difundir una doctrina que propugnaba
el amor al prójimo como a ti mismo.
Así
, cuando estén una temporada Ollanta y Nadine en prisión , dejarán de lado la
soberbia y se revestirán de esa humildad que se aprende en situaciones adversas
, extremas, cuando te colocan en el vacío , te privan de la libertad , te
humillan, te vejan, te estereotipan como un gran criminal , sin tener sentencia
.
Entonces, no le hables de Dios ni de Jesús a
los desventurados que caen en prisión o estén
en un hospital porque todos los días ,
en la soledad de esos cuartos lúgubres, en esos espacios de 3 x 4 , buscan a Dios
o Jesús, tratan de conversar con ellos para aferrarse a una esperanza.
¡
La esperanza!
Como dice Paulo Coelho en su libro “ Ser
como el río que fluye” la esperanza es lo único que los va a mantener vivos,
que los acompañará por la mañana, en la
tarde o en lo largo del día y muere en el anochecer , pero resucita con la
autora , ya que mientras hay vida, hay
esperanza .
Pero en la vida de los presos hay
concordancias felices y coincidencias. Los presos lo que más aprecian son los
días de visita, sus beneficios penitenciarios y su libertad.
Todos
los presos esperan con ansias los días de visita para conversar con tus
familiares, enterarte del mundo externo, de la familia, y si tienes suerte, te
visitarán los pocos amigos que te quedan porque la mayoría se espantan, apagan
celulares, tienen miedo y dudan.
A nadie le gusta seguir la suerte de los que cayeron en desgracia. Eso es normal porque
nadie quiere seguir la suerte de los desventurados, menos los que están en
prisión, porque la mayoría buscan buenas sombras donde guarecerse o siguen la
estela de aquellos que suben a la cima del poder.
Pero también te das cuenta que la vida
feliz, buena, llena de placeres y goces, la familia unida y feliz, todo se
transforma en el pasado y se desliza dentro de ti , porque a partir del día que
pisas la cárcel, estás sujeto a nuevas y
absorbentes raíces de un mundo extraño y tenebroso en donde escasea la
lealtad, la amistad, y la traición no es
un crimen.
.
Que sea inocente un procesado – primario,
que hayas sido presidente de la
República o presidente de alguna región o alcalde de algún lugar, o que en
realidad nunca hayas robado o asesinado
o no seas lavado de dinero, eso no
importa , eres un reo más mientras la
fiscalía prueba tu responsabilidad y se toman todo el tiempo del mundo porque
estás 18 o 36 meses de prisión preventiva que se ha convertido en una pena
anticipada ..
Y si te enviaron a una cárcel para
investigarte o procesarte, así no tengan una condena firme y consentida, la
realidad es que eres un preso y así te ve y considera el ciudadano a pie que
mira embelesado , con cierto placer y morbo de que un ex presidente que fue soberbio y un bacán ,
hoy está preso.
Las cárceles, sean doradas, anexos, prevención
, zonas vip, etc., están llenas de
sutilezas, de corrientes ocultas que se deslizan bajo la aparente tranquilidad,
la rutina diaria, de maquinaciones que es difícil descubrir sino pegas el oído
a las paredes .
Ollanta y Nadine tratarán de alejarse de la
“pensadora”, la angustia y la depresión en las horas de soledad, la desesperanza, a través del influjo catártico
de la lectura , mientras aprenden a
esperar y esperar ;ese universal deber del guerrero de la vida .
Todos los presos tienen un destino y un
secreto que tratan de ocultarlo ante los demás presos. Algunos guardan una
culpa que tiene que llevar él solo porque ahora, con culpa o sin culpa,
perteneces al mundo de los malos.
Si compartes secretos con los malvados, eso
depende de ti, porque nadie te pide nada.
Cuando llegas a ese mundo, estas aterido y
te sientes profundamente cansado, por más que intentes esbozar una sonrisa ante
la prensa y demostrar que no pasa nada y no sientes miedo. Eso es una mascarada.
La
cruz la llevas por dentro. Interiormente
estás temeroso, con el corazón angustiado, revoloteando en torno a lo que ha
pasado, piensas que esto no puede estar pasándote a ti que has sido un
presidente de la República o Primera Dama de la Nación.
Te acuestas la primera noche en una cama de
cemento, te prestan un colchón viejo y frío, así como una frazada, pensando que todo es una pesadilla y que al
día siguiente desaparecerá. Llega el día siguiente y te das cuenta de la
realidad : Cana es cana .
Los días de visita son los más esperados,
todo gira en función de estos días , los ánimos se levantan y desde temprano se
empieza a limpiar el pasadizo los baños , se le echa algún aroma para espantar
el olor a encierro y humedad .
Empiezas a entender y comprender que todo
sucede por algo, que quizás quieren probar tu fortaleza y que muchas veces uno es humillado por haber tenido gloria y
poder y que todos podemos ser
sorprendidos por el infortunio ya que el tiempo y el contratiempo nos llega a todos.
Al final , ustedes que gozaron del poder y en sus manos tuvieron el destino de
muchas personas y se presume que se hayan enriquecido con dinero mal habido, aprenderán que la vida nos enseña que nada es eterno y todo se
destruye y construye a la vez y la adversidad debe ser para crecer y no
destruirte, para fortalecer el espíritu, hacerte más sabio y ágil, porque
mientras hay vida hay esperanza, la libertad se consigue luchando días a día,
así como la justicia tan preciada y esquiva en nuestro país .
Tendrán una resurrección existencial porque
cuando salgan de prisión nunca serán los mismos. La prisión enriquecerá su apreciación sobre los
seres humanos porque el sentido de la vida se vive y extrae de la soledad, la
angustia, la incertidumbre.
El tiempo es de reflexión, de hundir las
miradas al corazón y no existe en estos lugares prejuicios de ninguna clase.
Dicen, los que lo han vivido, que se asiste
al nacimiento de la esperanza, la autenticidad, de la libertad, la caída de
falsos ídolos, el mundo revela su verdadera entraña.
Al final, qué importa sufrir humillaciones
y la estigmatización si existe una región en el alma que nunca podrá ser aplastada: la verdad encerrada en nosotros mismos, la de
ser inocente.
Les ha llegado el tiempo de la esperanza y
la resurrección, de la paciencia, de la espera.
Se abre los ojos para mirar al prójimo en
su humanidad entera porque en estos lugares los hombres viven en su esencia
descarnada.
Se mostrarán tales como son , libres de
vanidades y mascaradas.
Los Humala – Heredia tendrán su propia resurrección
existencial como seres humanos porque aprenderán a conocer quién o quiénes son
realmente sus amigos, quién o quiénes es su familia, harán las paces y serán
perdonados por aquellos que siempre los apreciaron pero que ellos los alejaron de
su lados porque haber sido embriagados por el poder, el dinero y la soberbia.
Excelente narración de la realidad carcelaria.
ResponderBorrarAquel(a) que perdió la libertad, por corto que sea el tiempo que pasó en la cárcel, es testigo de lo cruel que significa estar preso,
Y más aún, si fuera inocente.
La PRISIÓN PREVENTIVA es una medida excepcional que se toma contra una persona, en el Perú se está abusando de esta medida restrictiva y se están viendo casos, que revirtieron en una apelación.
Aunque el daño ya está hecho.
Debemos respetar la libertad de toda persona igual sus DERECHOS de :
Presunción de inocencia,
Debido proceso,
Dignidad y buen nombre.